Queridos amigos del monasterio hoy, 3 de agosto recordamos a:
Santa Juana Francisca de Chantal (en España se la recuerda el 12 de agosto) y una reflexión de San Bernardo de Claraval
Dice en el Martirologio Romano:
Santa Juana Francisca Frémiot de Chantal, religiosa, que, primero madre de familia, educó piadosamente a los seis hijos que tuvo como fruto de su cristiano matrimonio y, muerto su esposo, bajo la dirección de san Francisco de Sales abrazó con decisión el camino de la perfección, dedicándose a las obras de caridad, en especial para con los pobres y enfermos, y dio inicio a la Orden de la Visitación, que dirigió también prudentemente. Su muerte tuvo lugar en Moulins, junto al río Aller, cercano a Nevers, en Francia, el día trece de diciembre (†1641).
Oración Colecta de la Misa:
Oh, Dios, que adornaste con excelsas virtudes a santa Juana Francisca en los distintos estados de su vida, concédenos, por su intercesión, que, caminando fielmente según nuestra vocación, manifestemos siempre las obras de la luz. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Reflexión de San Bernardo de Claraval

¿Qué puede hallarse más enriquecedor y de más valor que la humildad? Por ella se compra el reino de los cielos y se alcanza la gracia divina, como dice el Evangelio : Dichosos los que eligen ser pobres, porque tienen el reino de los cielos.
Salomón añade: Dios se enfrenta con los arrogantes, pero concede gracia a los humildes. El nacimiento del Señor te inculca la humildad: le ves anonadado, tomando la condición de esclavo y viviendo como un hombre cualquiera.
Pidámosle a la Santísima Virgen María que estos ejemplos nos animen a gustar y vivir con plenitud la Vida de la Gracia.
Que Dios los bendiga.







